El uso de cualquier tarjeta de crédito o débito para pagar algún producto o servicio se ha vuelto algo tremendamente común para todos. Pero en México durante 24 horas se vieron regresados directamente a 1989; ya que el sistema para procesar estos cobros se colapsó.
Durante el transcurso del 10 de agosto de 2019 se acumularon múltiples reportes de fallo en distintos negocios a nivel nacional. La historia era siempre la misma: el cliente intentaba pagar con su tarjeta y el cobro era imposible en las terminarles.
Luego se descubrió que todo se concentraba en una sola empresa: Prosa, una compañía de servicios de transacciones electrónicas. Misma que volvió oficial el problema mediante un comunicado:
Según ha detallado la firma ante medios locales, uno de sus principales Data Center, ubicado en Santa Fe, y que conecta a diversas instituciones financieras; tuvo una falla eléctrica en su suministro de energía.
Lo que provocó que muchas de las tarjetas de crédito y débito en el país no fueran aceptadas; por igual en ningún comercio, ni cajero automático.
El problema tuvo su momento de mayor conflicto durante la mañana. En el transcurso de la tarde siguió presente, con varias intermitencias. Por lo que intentar usar una tarjeta sin conflictos se volvió una situación de azar.
El diario El Financiero consiguió mayores detalles gracias a informantes anónimos. Quienes relataron los problemas que implicó el error:
La falla presentada en una de sus redes de centros de datos fue debido a un tema eléctrico, que si bien entró en operación una planta alterna, el restablecimiento de las conexiones con las instituciones financieras requieren ciertos protocolos y procesos que se alargaron por varias horas.
Sobre la noche el asunto quedó solucionado. Y lo comunicaron a través de su cuenta oficial de Twitter:
Sin embargo se espera que este no sea el final de la historia. Ya que el fallo habría ocasionado pérdidas millonarias en todo México.