El calor húmedo de Dongguan y sus 37 grados, contrasta con el climatizado centro industrial donde Huawei fabrica en serie todos sus líneas de celulares.
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Está prohibido tomar fotografías y grabar videos, porque incluso las máquinas que ensamblan y arman los P30 y todos los modelos son de la compañía china y guardan celosamente todas sus patentes.
El ingreso de cualquier persona ajena a la planta de 12 mil metros cuadrados, es rígidamente controlada con estrictos accesos y con una vestimenta especial que hay que colocarse para caminar por los 120 metros de producción que incluyen 104 máquinas y 17 operarios humanos por línea.
Cada 28 segundos Huawei arma un celular
Estrictamente formados en línea y con una guía que nos traduce en inglés todo el proceso, vemos como 2.400 teléfonos se ensamblan y se prueban en más de 10 horas de proceso, sacando en promedio un móvil cada 28,5 segundos.
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Así podemos observar la maravillosa danza de ensamblaje y construcción con el siguiente recorrido:
1.Construcción de Placas madres
2.Ensamble de hardware y motherboard
3.Instalaciones y pruebas de software
4.Pruebas de cámara, tacto, video y sonido
5.P30
6.Embalaje final
Cada 2 horas hay un descanso para los trabajadores y tienen 90 minutos de almuerzo.
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Incluso estas condiciones tan humanas y necesarias para esta fabricación en serie, contrastan con el ritmo robótico que se mueve a cada segundo en esta industria.
Salimos justo de la fábrica a la hora del almuerzo, nos cuentan que lo único gratis es el arroz. Ya nos dio hambre.
