Durante años el mundo estaba a la expectativa por la gran inauguración del parte temático de Star Wars: Galaxy’s Edge, ubicado al interior de Disneyland en California.
Sin embargo, resulta que el parque fue tan grande que ahuyentó a sus visitantes y convirtió el sitio en una verdadera ciudad fantasmas que nadie visitó.
Durante semanas circularon publicaciones y fotografías en redes sociales, donde se mostraba que las calles de Disneyland estaban prácticamente desiertas.
Se trataba de una situación bastante inusual, ya que el verano es uno de los periodos de mayor afluencia para estos parques. Pero la evidencia mostraba lo opuesto:
Varios videos se hicieron virales, demostrando cómo el parque de Star Wars lucía relativamente lleno en sus días de apertura. Pero el resto de Disneyland estaba desierto.
Así que el tema fue ineludible para Bob Iger, CEO de Disney, durante su última conferencia con inversionistas. En donde culpó de todo, irónicamente, a Star Wars: Galaxy’s Edge.
Según el ejecutivo, las expectativas de que estaría imposible una visita por tantos fans interesados habría hecho que muchos reconsideraran pasar sus vacaciones haciendo filas en Disneyland.
Iger afirmó textualmente que»algunas personas se mantuvieron alejadas solo porque esperaban que no fuera una gran experiencia para los huéspedes».
Pero se trata de un balance peculiar: la asistencia a los parques de la compañía disminuyó un 3 por ciento en el tercer trimestre. Pero el «gasto per cápita» aumentó un 10 por ciento. A la par que la ocupación de los hoteles del lugar aumentó dos puntos porcentuales.
Pero tal vez el factor de mayor peso e incomodidad es que subió el precio de los boletos de entrada. Lo que también habría sido un factor de mucho peso.