El Rey David, quien fuera uno de los grandes patriarcas y líderes de los judíos y que en la Biblia fuera el guerrero vencedor contra el gigante Goliat, tuvo que escapar de la persecución del monarca Saúl y se escondió en Siclag por 14 meses, ciudad perdida que ahora se encontró por obra y gracia de excavaciones de la facultad de Arquitectura de la Universidad Hebrea.
El equipo fue liderado por Yosef Garfinkel y Saar Ganor, de la Autoridad de Antigüedades, y Kyle Keimer y Gil Davis, de la Universidad de Sídney.
Los restos del milenario asentamiento datan desde el siglo X al siglo XII y muestra indicios de la transformación de una urbe filistea a israelita.
La ciudad se encontró entre las actuales poblaciones judías de Kiryat Gat y Laquis y según trabajo con el carbono 14 se encontraron vasijas para el vino y el aceite que son del periodo del Rey David.
The Times de Israel además comenta que un incendio podría haber terminado arrasando con Siclag.
La historia cuenta que David estuvo 14 meses escondido del Rey Saúl y acá se alió con el filisteo Aquis para ir contra Saúl. La ciudad de Siclag además sirvió de paso para conectar a los judios con la antigua Babilonia.
David fue además vital en la historia de Israel por la unificación del territorio, y más tarde, la expansión hasta llegar a sumar ciudades como Petra, Samaria, Jerusalén y Damasco.