Microsoft anunció el día de ayer que invertirá mil millones de dólares en OpenAI, la firma de inteligencia artificial que ha ganado terreno en la prensa por sus inusuales inversores.
Entre los principales actores implicados en OpenAI, están varios del mundo tecnológico: Elon Musk, el co-creador de Tensor Flow y AlexNet Ilya Sutskever, Sam Altman y uno de los creadores de LinkedIn, Reid Hoffman.
La inversión de parte de la compañía de Satya Nadella es clarísima. Si bien Microsoft Research ha avanzado mucho el terreno de la inteligencia artificial, a la compañía le interesa desarrollar un concepto conocido como «Inteligencia Artificial General»: IA con la capacidad de aprender cualquier tarea intelectual que un humano pueda ejecutar.
Para ello, Microsoft planea unir los esfuerzos de OpenAI con Azure, su plataforma de procesamiento cloud. Esto significaría un acuerdo de exclusividad con Microsoft para extender las redes neuronales de OpenAI dentro de Azure, y «cumplir con la promesa de la inteligencia artificial general».
Adicionalmente, OpenAI le licenciará algunas de sus soluciones a Microsoft. Asimismo, la compañía de IA podrá entrenar modelos en Azure, cuya capacidad es bastante grande.
Una compañía ambiciosa
OpenAI entró muy fuerte al panorama de la inteligencia artificial en los últimos meses. La startup comenzó como una organización sin fines de lucro el 2015. Luego, entró al mundo de los venture capitals a través de una compañía pariente.
La empresa se ha encargado de desarrollar estudios en distintos campos de la inteligencia artificial. Entre ellos, se cuenta el procesamiento natural de lenguaje (NLP) o la visión computarizada. Su misión: crear software ‘superinteligente’ de manera segura.
Por ejemplo, una IA de OpenAI llamada Five jugó Dota 2 contra los mejores jugadores del mundo, ganando el 99% de las veces. Su entrenamiento fue en la plataforma cloud de Google. Cada día, la IA jugaba 180 años de partidas en 128 mil procesadores y 256 tarjetas gráficas NVIDIA Tesla P100.
