Cuando salió Cuphead en Xbox One a muchos nos llamó la atención, primero por sus gráficas de dibujo animado de los años 30 y posteriormente por su excelente jugabilidad y curva de dificultad.
En su momento, en el viejo y querido Niubie lo describimos de la siguiente forma:
Tanto enemigos, como personajes de soporte y los escenarios se ejecutan en perfecta armonía dentro de este concept caótico que propone la gente de Studio MDHR.
Lo anterior era jugando con el que es, para mí gusto, el mejor control de la actualidad, el de Xbox, pero sumarle una pantalla más pequeña y los Joy-Con es una experiencia compleja y no siempre para bien.
De partida, siento que el juego pertenece mucho más a una consola como la Switch, donde corre sin caerse y sin downgrades gráficos perceptibles, tanto en modo portátil como conectado del dock a la TV. Su estilo, su rapidez y su ingenio son ideales para dosis no tan largas de juego, donde quizás tienes un espacio para tratar de vencer a ese jefe que te tuvo un par de horas colgado y aún no logras superar. La inmediatez y la búsqueda de soluciones creativas para pasar sus niveles son el compañero perfecto de la portabilidad.
Ahora, el tema de jugar sin un D-Pad como corresponde y recurrir a un joystick pequeño requiere de una curva de aprendizaje no menor, y quizás un par de ampollas en el camino, porque convengamos que este es el tipo de juego que te hace estar concentrado y apretar fuerte la consola. Sí, todo es ideal con el Pro Controller, pero pierde un poco el sentido, es mejor acostumbrarse e incluso cambiar elementos como el dash de cualquiera de nuestros protagonistas a otro botón. Todo es configurable y se agradece. Al final del día lo que quiero decir es que se puede jugar en esta consola, cuando antes pensaba que no había posibilidad.
Los tiempos de carga son cortos y el juego se ve particularmente atractivo en la pequeñita pantalla de la Switch. En conclusión, es una experiencia extremadamente recomendable si tienes la consola y nunca lo jugaste, o si buscas darle otra pasada al juego pero ahora teniéndolo para llevar. Al precio que se ofrece, que bordea los 20 dólares, está totalmente recomendado y es más, no debería faltar en ninguna biblioteca de Switch, aunque ojo, ya saben que este juego no es para los que no tienen tolerancia a la frustración.