En mayo del año pasado mi compañero Raúl revisó el Fitbit Versa, un reloj inteligente que describió como «para todo público», en comparación a las entregas anteriores de la marca.
Y es que Fitbit, una empresa que está súper enfocada al tema del deporte y el bienestar no había entregado un producto que fuera tan lúdico y con una estética tan permisiva, sin perder su espíritu de reloj deportivo que los hace bien únicos, o al menos pioneros en el tema.
Ese reloj tenía un precio mayor a los 200 dólares (dependiendo de la versión) y quizás ese era su problema, porque como medidor físico, que es lo que mejor hace, cumple, pero como «smartwatch», le cuesta mantenerse frente a lo que puede lograr un Samsung o un Apple. Dado eso, sacaron una versión Lite a 160 dólares y ¿la verdad? no noté diferencias con el otro más caro.
Sucede que las características que recortaron, como el poder reproducir música desde el mismo reloj no es algo que utilice, tengo otros métodos. El no tener WiFi me da lo mismo porque lo uso conectado al teléfono por Bluetooth y el no medir cuántos pisos subo tampoco me afecta.
Lo que sí utilizo es la medición de sueño, que lo hace perfecto. Tener conciencia 24/7 de mi frecuencia cardiaca, leer y responder notificaciones, resistir el agua y no ser una banda deportiva, ser un reloj con todo el espíritu de Pebble, donde puedo encontrar una cantidad enorme de carátulas hechas por una comunidad súper entusiasta.
Y ese es el punto exactamente, un lugar intermedio entre banda deportiva y reloj inteligente a un precio súper justo, 160 dólares.
El catálogo de colores y opciones de correas es muy amplio y a pesar de que se perdieron un par de botones en comparación a la versión más cara, nunca los extrañé. De verdad, ningún día.
El futuro para Fitbit se ve prometedor y creo que están haciendo las cosas bien, porque además del hardware, su aplicación es súper completa y con una comunidad bien motivada, te hace sentir parte de algo. Si tuviera algo que alegar, es la falta de integración con el sistema nativo de salud de Google, lo mismo con HealthKit de Apple, pero bueno, así es la vida (hay aplicaciones externas que logran la sincronización, pero sería un gusto que fuera de forma nativa).
Sin duda es una excelente opción para alguien que busca un vestible sin compromisos y que cumpla a tope con lo que promete, además de tener muchísima personalización y una batería que puede durar fácil 4 días.