Candida Auris se llama el peligroso hongo que demostró en las últimas horas una resistencia feroz y que está poniendo en riesgo a pacientes con un sistema inmunológico muy debilitado. Una infección intrahospitalaria que no es nueva, pero que ha generado temor, por su fuerte aparición.
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Según el «Center for Disease Control and Prevention«, presenta una seria amenaza a nivel global por tres cosas:
- A menudo es resistente a múltiples fármacos, lo que significa que es resistente a múltiples medicamentos antimicóticos comúnmente utilizados para tratar las infecciones por Candida .
- Es difícil identificarse con los métodos de laboratorio estándar y se puede identificar erróneamente en laboratorios sin tecnología específica. La identificación errónea puede llevar a una gestión inadecuada.
- Ha provocado brotes en entornos sanitarios. Por esta razón, es importante identificar rápidamente C. auris en un paciente hospitalizado para que los centros de atención médica puedan tomar precauciones especiales para detener su propagación.
Candida Auris levanta las alarmas en Estados Unidos
El New York Times advirtió hace algunos días que este hongo estaba reapareciendo en recintos hospitalarios de Estados Unidos.
Este hongo provoca enfermedades severas e invasivas que afectan la sangre, el corazón y el cerebro con una alta mortalidad.
Otros países que este año han reportado infecciones por el Candida auris:
- Canadá
- Venezuela
- Reino Unido
- Alemania
- Francia
- España
- Pakistán
- Japón
- India
- Sudáfrica
Este hongo ataca principalmente a pacientes con un sistema inmune más débil, como enfermos de cáncer, niños y ancianos. También a pacientes con cirugías recientes, que sufran diabetes, que usen antibióticos y antimicóticos de amplio espectro, que tengan un catéter venoso central o que fumen.
Cómo se propaga
Las formas de propagación tienen que ver con el contacto: manos del personal de salud y del entorno que rodea al paciente (habitación, cama, mesitas de luz, aparatología médica para realizar estudios, entre otros).
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Por eso es importante la higiene, lavado de manos y sobre todo la desinfección de superficies.
Síntomas
Más del 90 por ciento de las infecciones por Candida auris son resistentes a los antimicóticos, mientras que el 30 por ciento son resistentes a dos o más de los principales antimicóticos. Una vez que está presente el germen, es difícil erradicarlo de la instalación infectada.
Por ejemplo, es resistente al fluconazol, un fármaco antifúngico de uso habitual en el tratamiento de las candidemias y de otras candidiasis invasoras. Además, algunas cepas han mostrado resistencia a otros fármacos antifúngicos como voriconazol, anfotericina B o las equinocandinas.
Produce generalmente fiebre, dolor y fatiga.
Las candidiasis (infección por la sangre) por Candida auris se asocian con una alta mortalidad (40-70%) que no puede atribuirse exclusivamente a la infección porque los pacientes están habitualmente ingresados en UCI porque sufren complicaciones de enfermedades subyacentes importantes, como diabetes o cáncer.
Tratamiento
Al ser resistente a una gran cantidad de antimicóticos, el tratamiento debe ser dirigido y hay que tomar en cuenta por un lado el estado del paciente y la resistencia in vitro del hongo. Requiere que el paciente esté aislado.
Estas infecciones deben ser notificadas al centro de control de enfermedades (CDC) de Estados Unidos.