Hace un tiempo hablamos de una de las últimas laptops que había lanzado Asus al mercado, el Zenbook Pro 15. En ese entonces exploramos cada una de las características de ese equipo, hablamos de sus capacidades, lo que nos llamaba la atención, su precio, etc.
Sin embargo, vale la pena volver a mencionar una de las características más destacables del Zenbook Pro 15. Se trata de su mousepad, o mejor dicho, screenpad. Como contamos anteriormente, esta laptop tiene una pantalla incorporada al mousepad, lo que le da una nueva dimensión de posibilidades.
Esta característica no solo es llamativa, sino que es tan limitada en el mercado que pocos saben qué se puede hacer con ella. Por lo tanto, esta vez vamos a hablar únicamente de lo que es capaz el screenpad del Zenbook Pro 15:
Una nueva forma de interacción
Lo primero que hay que entender es que este mousepad especial puede alternar entre varios modos con el botón F6. Así, puede cambiar entre funcionar únicamente como una extensión de pantalla, cómo únicamente un mousepad o como un pequeño administrador de apps en el modo screenpad. Además, se puede deshabilitar por completo.
Hablemos de su modo screenpad. Deslizando el dedo de arriba a abajo, se puede desplegar un menú que muestra algunas de las opciones que trae por defecto. Aquí encontramos un calendario que se sincroniza con el de la cuenta de Microsoft, una calculadora, un reproductor multimedia, entre otras cosas. Cabe aclarar que todos esos widgets pueden ser operados de forma táctil.
Si abrimos el launcher, podremos tener desde allí acceso a Microsoft Edge, la Microsoft Store o el correo electrónico. De hecho, con un solo toque podremos abrir la mayoría de aplicaciones de Windows. Adicionalmente se pueden descargar otras aplicaciones para este apartado.
Algo interesante es que el screenpad funciona a la par de programas como los pertenecientes a Office. Cuando abrimos alguno, en la pequeña pantalla aparecerán ciertas herramientas para facilitarnos la vida y tenerlas a la mano. Por ejemplo, al abrir Excel podremos guardar desde allí, aumentar el tamaño de letra, ponerla en negrita o cursiva, cambiar de color tanto el texto como las celdas, etc. Después de probar esto hay que admitir que resulta ser muy útil después de acostumbrarse.
Como si fuera poco, podremos lanzar Youtube y Spotify desde el screenpad. Al descargar sus aplicaciones tendremos música o cualquier video que deseemos reproduciendo en la pequeña pantalla. Si bien se puede activar un cursor para manipularlos con el dedo, resulta significativamente de mayor control usar un mouse clásico al ser el cursor tan pequeño.
Experimentando con la extensión de pantalla
Pero más allá de las aplicaciones del screenpad, el Zenbook Pro 15 también ofrece una interesante forma de interacción al usarse como extensión de pantalla.
Cuando se activa esta opción, el screenpad tendrá su propio escritorio. Así, si queremos desplazar cualquier programa o pestaña de navegador que se esté ejecutando, lo podremos manipular desde la pantalla pequeña. Cuando decimos que cualquiera, no estamos bromeando. Solamente es arrastrarlo hacia abajo y dar doble click para que la ventana se ajuste.
Las posibilidades sobre esto son casi que infinitas. Una utilidad es que se pueden ver dos videos de Youtube al tiempo en las dos pantallas, los cuales se reproducen con total naturalidad. También sirve para que mientras trabajas puedas estar con un ojo puesto a que llegue un correo electrónico importante. Sin embargo, puede que probablemente se utilice más para estar leyendo o trabajando en una pantalla, mientras que en la otra se tiene activa una distracción.
Uso con videojuegos y edición
Esto aplica inclusive para videojuegos. En las pruebas se pudo leer un artículo científico completo mientras se tenía abierto World of Warcraft. En este punto hay algo interesante, y es que los controles del teclado se adaptan a la pantalla donde estemos usando el mouse. al cliquear en la pantalla de arriba, los comandos de teclado atendían al navegador, y al cliquear abajo el teclado atendía a los controles del juego.
Curiosamente más allá de la incomodidad de verlo todo más pequeño, se podía jugar con normalidad desde el screenpad. Sin embargo, hubo algo que llamó la atención: los fps se cortaban a la mitad en la pantalla no activa. Por ejemplo, el juego al estar en segundo plano pasaba a los 15fps (sobre los 58 estaba al estar activo en la pantalla principal).
Algo más que notar es que hay aplicaciones que se adaptan mejor a la segunda pantalla que otras. En el caso de Hearthstone, no hubo manera de pasarlo al screenpad sin que el juego terminara explotando. Más allá de un lindo «No Responde», no se pudo lograr más.
Para los programas de edición no hubo ninguna dificultad en pasar Photoshop o Premiere al screenpad. De hecho, se podía dejar al Premiere exportando un video sin que esto representara una molestia en la pantalla principal. Bueno, sería el colmo si fuera así; después de todo ostenta 16GB de RAM. En resumidas cuentas es altamente recomendable dejar cualquier proceso de carga en esta pequeña pantalla para hacerle seguimiento sin necesidad de dejar lo que se está haciendo.
En conclusión el screenpad resultó superando por mucho las bajas expectativas que se pueden tener en un principio. Como se ha dicho en repetidas ocasiones, el límite de esta característica es la imaginación del usuario. ¿Quiero tener mi feed de Twitter abierto y escribir desde él? ¿Quiero echar un vistazo a los mensajes que me llegan al Whatsapp? ¿Me considero multitasking y puedo trabajar al tiempo que veo una serie? ¿Prefiero jugar y editar al tiempo? Sin duda es mucho lo que ofrece una adición como esta en el Zenbook Pro 15.