La casa de Los Picapiedras siempre ha sido un ícono para los nostálgicos y es posible que esa haya sido la inspiración de unas personas en las colinas hollywoodenses de Hillsborough, en la calle Berryessa 45.
Sin embargo, no todos están contentos con esta mole que recuerda a la familia de Pedro Picapiedra, ya que los vecinos de la zona están indignados con lo que consideran una aberración que va contra los estándares arquitectónicos y estilísticos del barrio.
Según la misma descripción en su sitio web, esta casa es considerada un patrimonio.
La casa de Los Picapiedras en la discordia
Pero no todo es miel sobre hojuelas para los dueños de esta construcción, ya que los vecinos de la zona han presentado una demanda contra el dueño.
El dueño de apellido Fang ya pagó una multa de 200 dólares, sin embargo, aún mantiene los controvertidos dinosaurios en el jardín.
«Creo que son bonitos, hacen sonreír a todo el mundo, y creo que deberían quedarse», manifestó el dueño de la casa.