El ser humano ha imaginado su visita a Marte desde hace décadas, pero en 2011, un proyecto privado llamado Mars One extendió esta idea planteando la posibilidad de establecer una base humana en el planeta rojo. Sus planes no encontraron buenos resultados.
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La idea era simple en el papel, pero no en la realidad. La empresa había dicho que la base podía tener lugar en 2025 y que las principales vías de financiación sería a través de ingresos publicitarios.
No obstante, el MIT calculó que los participantes se asfixiarían a los 68 días de su llegada a Marte por los fallos en el diseño de los habitáculos. De ahí en adelante, todo fue en picada.
Se acaba de conocer que Mars One Ventures AG, con sede en Suiza, ha acumulado una deuda de 1,1 millones de francos suizos, una millonada que la tiene en quiebra.
Si bien a empresa asegura que hay un inversor dispuesto a pagar la deuda, el futuro de los viajes de la compañía son, a lo menos, inciertos.
Aunque la noticia quiebra parcialmente los planes de la empresa, el hecho de que los humanos lleguen a Marte con misiones tripuladas, no es descabellado. De hecho, la misma NASA ha dicho que pronto podríamos hacerlo. Otros países como China también están en la carrera (ve esto).
