Existe una fijación innegable de la humanidad con los agujeros negros supermasivos. Pero la confirmación de la existencia de uno siempre resulta perturbadora.
Justo así acaba de suceder con Sagittarius A*, una formación que se encuentra al centro de nuestra galaxia; pero que por años había sido un misterio para todos. Hasta ahora.
De acuerdo con un anuncio oficial, comunicado por el European Southern Observatory (ESO). Un grupo de científicos utilizó el Very Large Telescope (VLT); para observar brotes de radiación infrarroja del disco de escombros que rodea a Sagittarius A *.
En paralelo, los investigadores usaron el interferómetro del telescopio GRAVITY para observar tres bengalas brillantes orbitando alrededor de la formación; mismas que iban a una velocidad equivalente al 30% de la velocidad de la luz.
Estas llamaradas serían causadas por los gases calientes que orbitan a Sagittarius A *; en colisión con los campos magnéticos que la rodean.
La conjunción de todos estos fenómenos representan evidencia absoluta de que Sagittarius A * sería en realidad un agujero negro supermasivo.
De modo que el ESO editó este video especial donde muestra una simulación de cómo sería el fenómeno; en razón del ritmo de las bengalas.
Esta es la primera vez que se observa material tan cerca del horizonte de eventos de un agujero negro supermasivo.
Y lo mejor es que está al centro de nuestra galaxia.