Estados Unidos se ha sumergido en un frenesí de locura durante las últimas 24 horas. Todo debido al envío de varias supuestas bombas a personajes políticos y públicos distinguidos por manifestarse como firmes opositores a Donald Trump y su gobierno.
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Todo inició este 23 de octubre, cuando el magnate George Soros, figura distinguida del Partido Demócrata, recibió un paquete con una bomba tubular directamente en el buzón de su casa.
Al principio lucía como un incidente peligroso pero aislado, con un remitente falso. Sin embargo, tras ello comenzó una marejada de envíos de bombas; todas a personajes de la oposición republicana en la administración de Trump.
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El ex presidente de Estados Unidos, Barack Obama; y la ex secretaria de Estado, Hillary Clinton fueron las siguientes víctimas.
En el caso de la contrincante de Trump en las pasadas elecciones lograron interceptar el paquete antes de que lo recibiera.
Pero cuando la CNN estaba reportando esto último tuvieron que evacuar su edificio; por recibir exactamente el mismo «regalo».
Eso bastó para que Donald Trump hablase del tema. Culpando abiertamente a los medios de comunicación por provocar este ambiente de hostilidad (¿al criticarlo?).
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https://twitter.com/realDonaldTrump/status/1055418269270716418
La confusión y el desconcierto se mantienen, pero la ola sigue. Los más recientes reportes afirman que el ex vicepresidente Joe Biden y el restaurante de Robert De Niro en Tribeca se acaban de sumarse a la lista de destinatarios.
Un historial de pleitos
Todo esto sucede a la mitad de las campañas por las elecciones intermedias. Lo que no ha escapado del ojo de los comentarios en Twitter.
Resaltando el factor evidente de que todos los atacados tienen un historial de conflictos con Donald Trump.
Barack Obama se ha mantenido como un sobrio pero contundente crítico a las decisiones de la administración del actual presidente.
Hillary Clinton ha llevado una relación más tensa con Trump; bajo parámetros similares a los de su compañero de partido.
CNN en más de una ocasión ha sido víctima de ataques por parte del Presidente; a través de sus redes sociales.
Y Robert De Niro fue motivo de noticia no hace mucho por insultar a Trump en cadena nacional en vivo.
Todo apunta a que aún queda más suceder.