El Cubo de Rubik es tal vez uno de los artículos más queridos por las generaciones que nacimos entre la década de los 80 y 90. Sin embargo, resolverlo por primera vez siempre fue un auténtico reto.
El culto en torno a este juguete se ha mantenido viva a lo largo de los años; y esto ha detonado la encarnación de algo inevitable; pero que parece salido de una historia de ciencia ficción: un cubo de Rubik capaz de resolverse por sí mismo.
El youtuber japonés Human Controller hace una semana compartió a través de su canal los resultados esta creación suya. Tardó un poco en despegar, pero poco a poco se está convirtiendo en un fenómeno viral. Pero el secreto del furor es simple: resulta impresionante ver al cubo cómo se resuelve solo.
Para lograrlo estos japoneses construyeron el cubo de Rubik alrededor de un núcleo personalizado, impreso totalmente en 3D; y alimentado por una serie de servomotores.
Eso hizo posible los movimientos de rotación generados desde el interior; sin necesidad de que intervenga una mano humana. Mientras que para la parte de la memoria e inteligencia del dispositivo se utilizó una placa Arduino.
Como podemos observar es necesario que el cubo esté resulto en su fase inicial y luego modificarlo para hacer que el juguete se resuelva.
Pero no deja de ser asombroso.