¿Recuerdan el hackeo bancario masivo que sufrió México hace algunos meses? pues el FBI acaba de descubrir una amenaza similar pero de una escala mucho más grande. Tanto que haría parecer a ese incidente como un mero juego de niños.
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El blog renombrado de seguridad cibernética KrebsOnSecurity afirma haber conseguido un documento del FBI. En donde se envía una alerta global sobre un inminente ataque masivo a cajeros automáticos (ATM).
Suena como parte de la trama de una mala película, pero en realidad la amenaza sería real; y según marca el supuesto texto podría afectar a cualquiera que tenga una tarjeta bancaria:
El FBI ha obtenido informes no especificados que indican que los delincuentes cibernéticos planean llevar a cabo un plan de ataque para retiro masivo de efectivo de cajeros automáticos en los próximos días. Probablemente el robo esté asociado con una falla de seguridad desconocida para el emisor de la tarjeta y comúnmente denominada como ‘operación ilimitada’.
Los delincuentes cibernéticos suelen crear copias fraudulentas de tarjetas legítimas; enviando los datos de tarjetas robadas a los conspiradores. Que imprimen los datos en tarjetas de banda magnética reutilizables; como tarjetas de regalo compradas en tiendas minoristas.
En un momento predeterminado [por los líderes de la operación], los co-conspiradores retiran los fondos de la cuenta de los cajeros automáticos que usan estas tarjetas.
El fallo de «operación ilimitada», según marca Brian Krebs, encargado de revelar la advertencia; compromete a una institución financiera o al propio procesador de las tarjetas bancarias a través de un malware.
Mismo que permite acceder a la información de la tarjeta del cliente del banco; lo que permite el robo de dinero desde los cajeros automáticos. Aunque se necesitaría obligatoriamente una coordinación global de los hackers con los ladrones de cajeros.
Sin embargo no hay una fecha concreta para el posible ataque. Aunque la alarma fue difundida por el FBI desde el pasado viernes 10 de agosto de 2018.
El consejo es monitorear de cerca la actividad de sus tarjetas bancarias.