Julian Assange está desde 2012 encerrado en la embajada de Ecuador en Inglaterra y parece que el fin de su estadía está cada vez más cerca. Según Euronews, el gobierno ecuatoriano y el británico están ya discutiendo el asunto para eventualmente llegar a una solución que, como nunca desde 2012, parece en vías de cerrarse con la salida de Assange del edificio.
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El presidente de Ecuador, Lenin Moreno, aseguró en un evento reciente en Madrid, España, que nunca ha estado de acuerdo con las actividades a las que se dedica Julian Assange en términos de filtrar documentos confidenciales a través de Wikileaks, pero aún así cree que a una solución se puede llegar mediante diálogo.
Para Moreno, que alguien como Assange haya pasado tanto tiempo encerrado incluso atenta contra sus derechos humanos. Y por ende, la prioridad ahora es asegurar que cuando Julian Assange salga la embajada su vida no corra peligro, tomando en cuenta que si el fundador pone un pie en la calle probablemente sea arrestado de inmediato.
Durante el último año, las relaciones entre Julian Assange y quienes le dan hospedaje parecen haberse tensado y especialmente luego de que se supiera que el gobierno anterior de Ecuador gastara mucho dinero protegiendo al fundador de Wikileaks: millones de dólares en espionaje, según la investigación de The Guardian y Focus Ecuador.
En marzo pasado además, a Assange le cortaron el internet por hablar más de la cuenta en redes sociales, en algo que parece una muy buena idea no solo para Assange sino para el mundo en general.
