La geografía de Chile cuenta con un gran potencial para explotar la energía eólica. Afortunadamente, esto ya está sucediendo y en el país se cuenta con más de 650 torres dedicadas a la producción.
Los beneficios de las energías limpias destacan por excluir cualquier tipo de contaminación. Vale decir, son energías que no generan residuos. Dentro de esta categoría está la eólica, que en Chile ha tenido un crecimiento importante.
Según consignó La Tercera, en solo diez años, desde el 2007 (cuando entró en operación el primer parque eólico unido al Sistema Interconectado Central, SIC) al 2017, la energía eólica del país pasó de ser prácticamente inexistente, a cubrir el 4,7% del Sistema Eléctrico Nacional. Aunque aún parezca poco, el rubro tiene un gran potencial.
En el 2007 se partió con 11 aerogeneradores que producían 1,65 MW cada uno, en Región de Coquimbo. A la fecha, se han instalado 651 de estos aerogeneradores que logran generar 1.426 MW al país. La Asociación Chilena de Energías Renovables (Acera) dijo al mismo medio que el crecimiento sigue evolucionando: