Stranger Things es una serie que seguramente evocó momentos de la niñez en muchos. Incluso a más de alguno le habrá recordado realizaciones de la época. Sin embargo, un director acusa directamente a los hermanos Duffer de aprovecharse de una idea que él mismo les presentó.
La acusación no es menor. Este lunes, Kessler llegó hasta un juzgado de Los Ángeles (EEUU) para expresar que los hermanos se aprovecharon de un idea que les comentó durante el año 2014 en el Festival de Cine de Tribeca. La conversación habría tenido lugar durante una fiesta.
Todo apuntaría a una realización llamada Montauk (2012), que narra fenómenos paranormales, desde donde los Duffer habrían extraído las ideas principales de la serie. Kessler les habría comentado su idea de hacer una película llamada The Montauk Project, basada en un libro de los noventas.
La temática de Montauk involucra la historia de un niño desaparecido, precisamente una base militar que realiza experimentos con niños y un monstruo de otra dimensión que parece un juguete. Tanto Montauk, como Stranger Things aparecieron después de un libro llamado The Montauk Project: Experiments in Time del año 1992, que del mismo modo explota la idea de los experimentos secretos del gobierno.
Kessler aseguró que la idea que les expuso a los hermanos fue dentro de las prácticas de la industria del entretenimiento, cuestión que no les daba derecho ni a divulgarlas ni aprovecharla para proyectos propios. No, al menos, sin ofrecerle una retribución.
Por si fuese poco, las peticiones de indemnización se suman a otra exigencia de Kessler: destruir todos los materiales de Stranger Things que estén basados en sus conceptos de Montauk.