Un sistema ideado por cuatro chilenos logró predecir con éxito el último sismo que afectó a Chile este martes. Se llama Xancura y avisó con casi un minuto de anticipación el movimiento 6,2 en escala Richter.
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Ayer martes tuvo lugar entre las regiones de Atacama al Biobío un sismo de mediana intensidad. El cuadro sirvió para que Carlos Bottner, José Río, Javier Celedón y Mauricio Godoy, probaran el sistema Xancura, que finalmente arrojó resultados que podría cambiar el manejo de las situaciones de emergencia.
Todo comenzó en 2010, cuando un grupo de investigadores japoneses presentó al gobierno una propuesta para instalar una alerta temprana de sismos. El grupo de investigadores, quedó pensando en las formas de perfeccionar el manejo de estos cuatros e instalaron un acelerómetro de alta sensibilidad en Pichilemu.
Tal como consigna el medio local Cooperativa, el dispositivo logró captar “las olas de la zona y con lo cual aprendieron a calibrarlo, para luego afinarlo con las réplicas de eventos sísmicos”. Carlos Bottner, mencionó al mismo medio que Xancura cuenta con dispositivos conectados a una red de 60 estaciones de monitoreo distribuidas entre La Serena y Concepción:
El sistema nos despertó 57 segundos antes de que pudiéramos sentir el temblor (…) Las estaciones miden la aceleración y velocidad de la oscilación de las ondas sísmicas, calculando la intensidad del movimiento y transmitiéndolo a un centro de control de Estados Unidos que discrimina si es un sismo u otra fuente de movimiento.
Los ingenieros creen, de momento, que el sistema podría ser trascendental para conectarlo a sistemas informáticos que sirvan para detener ascensores o barreras de estacionamiento, puesto que las ondas sísmicas «viajan más lento que la señal de internet». En todo caso, el tiempo podría variar dependiendo del alcance del sismo:
La señal puede llegar con mayor o menor tiempo de anticipación según la distancia entre el epicentro y el aparato. Es decir, si estamos a 240 kilómetros de distancia se notificará el temblor con casi un minuto de antelación, mientras que a 40 kilómetros, el tiempo se puede reducir a 10 segundos.
Al mismo tiempo, un grupo de científicos del Departamento de Física FCFM de la Universidad de Chile descubrió una relación entre las variaciones geomagnéticas y sismos ocurridos en los últimos años. Esta investigación, de hace solo unas semanas, podría ser clave para predecir sismos en un futuro con un mayor tiempo.
