Luego del lamentable accidente protagonizado por un vehículo autónomo de Uber en el que falleció una persona, sucedió lo que tenía que pasar: el gobierno de Arizona le suspendió a la compañía el permiso para realizar pruebas de autos autónomos.
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El gobernador del estado, Doug Ducey, envió una carta al CEO de Uber en la que -según Associated Press– se pone en duda que el cumplimiento de las normas de seguridad alrededor de los autos autónomos:
Mis expectativas como gobernador son que la seguridad pública sea la principal prioridad de todos quienes operan y prueban la nueva tecnología en Arizona.
Y por eso, el accidente sucedido el 18 de marzo es un fracaso incuestionable.
La medida de Ducey se basa en lo sucedido con Uber, pero otros reportes indican que las autoridades ya tenían dudas incluso antes del fatal accidente. El medio Tucson.com indica que Arizona, y particularmente el gobernador que asumió su cargo en 2015, se mostraron en su momento muy abiertos a facilitar las pruebas de conducción autónoma de diversas empresas en general, pero desde entonces las cosas han cambiado.
Uber, por su parte, suspendió las pruebas de conducción autónoma en todas las ciudades en las que estaban llevándose a cabo y no solo en Arizona. Y con esto, se cierra un mes bastante complejo para Uber porque además del accidente, sellaron su retirada desde el gigantesco mercado del sureste de Asia.