Ciertamente, existen formas de saber si una pagina es o no confiable. Por ejemplo, hacer las transacciones con HTTPS a estas alturas es fundamental. Sin embargo, un usuario igualmente puede encontrarse con estafas. Para prevenir esto, una startup creo una tarjeta desechable para compras online.
Cuando un usuario desea comprar un producto en linea, inevitablemente (si quiere pagar con dinero tradicional) debe ingresar los datos de su tarjeta. Aunque se sospechase de actividades maliciosas en algún sitio, muchas veces las ganas de tener ese producto puede hacer colocar los datos en lugares equivocados.
Bajo esta premisa se crea la startup Revolut, cuyo software genera tarjetas bancarias 100% operativas. Si bien ya se pueden generar tarjetas virtuales por una tarifa, este es un tipo de tarjeta virtual es diferente, ya que se autodestruye después de cada transacción. Así se perfilan en su sitio:
Después de la transacción, el sistema desactiva la tarjeta para siempre. Vale decir, si el sitio web quiere cobrar nuevamente, la transacción fallará. Aunque se trata de un servicio de pago, que incluso tiene una sección premium, Revolut genera una nueva tarjeta desechable segundos después.
La firma también tiene una sección para la compra de criptomonedas. Cuestión que parece lógica tratándose de mercados online.