Aunque la ejecución del periodista estadounidense James Foley fue hace tiempo, Le Pen fue acusada por colgar las fotografías en Twitter por un juez de Nanterre. Podría enfrentar hasta tres años de prisión.
En Francia se toman en serio el control de imágenes violentas, como las que se difundieron luego de que James Foley fuese asesinado por extremistas yihadistas. Marine Le Pen subió fotografías en diciembre de 2015 del asesinato, según ella, para protestar contra los paralelismos hechos entre su partido y el grupo yihadista.
El Frente Nacional (del cual es presidenta) es un partido nacionalista de extrema derecha, tildado de ser pro fascista, que se ha manifestado en contra de la inmigración y sido objeto de varias polémicas. En declaraciones recogida por El Español, Le Pen consignó que no sabía de quién eran las fotos.
El Frente Nacional ha enfrentado otras polémicas relacionadas con racismo, como cuando una de sus dirigentes, Rethel Anne-Sophie Leclere, se burló en Facebook de la ex ministra de justicia Christiane Taubira (de piel morena), mencionando: “Prefiero verla tras las ramas de un árbol que en el Gobierno”.
Le Pen es un personaje público, presidenta de su partido y Diputada de la Asamblea Nacional. Tras la polémica, donde de igual forma mantuvo fotos de un hombre aplastado por las cadenas de un tanque y otra de un prisionero en llamas, podría enfrentar una multa de hasta 75 mil euros e incluso 3 años de cárcel.