Desde el bullado caso de San Bernardino, donde la policía de Estados Unidos estaba en problemas por no poder acceder al iPhone del tirador, las cosas han cambiado y ahora sabemos cómo.
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En ese entonces el FBI no contaba con la tecnología para desbloquear un iPhone, pero ahora les sale tan fácil como mandarlo a una empresa que les cobra 50 dólares.
Hace no mucho, en el caso mencionado al inicio se hablaba de 900 mil dólares. Es ahí donde Grayshift, la empresa de un ex empleado de Apple entra en juego.
Esta empresa creó Grayscale, que gracias a Motherboard podemos conocer:
Ahora, los esfuerzos no son menores, por lo que solo los aceptan «al por mayor», en lotes de 300 iPhone.
¿La máquina? Un pequeño cuadrado que simplemente tira montones de combinaciones hasta desbloquear el equipo.
La pregunta que nos queda es que uno puede, en opciones, optar a que el equipo se borre si fallan en cierta cantidad de intentos ¿Qué forma de burlar ésto habrán ingeniado?
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Además, se supone que por defecto, cuando son muchos intentos fallidos y aunque lo anterior esté desactivado, el iPhone hace que debas esperar cierto tiempo hasta introducir un nuevo intento.
Si cometes un delito y creías que la información de tus fechorías estaba a salvo porque usabas iPhone, piensa otra vez.
