Google se hartó de que su sistema operativo vestible fuera asociado a su sistema operativo móvil y le sacó el «Android» del nombre, ahora se llama Wear OS.
Así informan los de Mountain View en su blog oficial, donde consignan que:
Tristemente las noticias sobre nuevos y excitantes dispositivos vestibles con, ahora, Wear OS, han sido escasas. De hecho pasó CES y el Mobile World Congress sin novedades.
Esta suerte de olvido por parte de los fabricantes se puede deber a que, a pesar de que se abrieron para funcionar con los iPhone, la gente parece no haber encontrado mayor interés en, por ejemplo, los relojes inteligentes, que es la tecnología vestible que más se ha promocionado.
Otro factor que puede estar jugando en contra es que Qualcomm, el principal fabricante de procesadores del mundo, no actualiza su chip para vestibles hace más de dos años, presumiblemente por las mismas razones comerciales que los fabricantes han tenido para no lanzar regularmente más de estos dispositivos.
Actualmente los dos principales jugadores del mundo vestible no usan Android Wear (ahora Wear OS), sino que ocupan sus propios sistemas operativos: Apple con Watch OS y Samsung con Tizen.
Los anteriores tampoco dependen de Qualcomm para fabricar sus relojes inteligentes. Veremos qué le depara el futuro a Wear OS, y más ampliamente, al mercado de los vestibles en general.
