El Petro, la criptomoneda de Venezuela, encontró rápidamente un enemigo en Donald Trump. ¿A alguien le sorprende?
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El gobierno de Estados Unidos ha declarado que el Petro es ilegal a través de una orden ejecutiva emitida por la Casa Blanca y firmada por el presidente Donald Trump en la que se especifica que «todas las transacciones quedan prohibidas» a los ciudadanos estadounidenses a contar desde el 19 de marzo de 2018.
En declaraciones a Fortune, el director de Caracas Capital Russ Dallen indicó que la medida es «un gran golpe al Petro» porque las criptomonedas se basan en pura especulación. «Y si quitas a Estados Unidos de la ecuación, se reduce mucho el interés y por ende, el potencial de la especulación».
Por supuesto que desde Venezuela las reacciones no se hicieron esperar. Diosdado Caballo, vicepresidente del partido socialista del país, se tomó Twitter para echarle la culpa al imperialismo:
Además, el subsecretario del tesoro de EE.UU, Steven Mnuchin, indicó que Petro no es más que un intento de Maduro de «evitar sanciones» luego de la crisis humanitaria y económica que el mismo ha desatado en el país.
Hasta el mes pasado, en Venezuela decían tener ofertas millonarias por el Petro, luego de haberlo lanzado a modo de preventa. Sin embargo, la decisión de Estados Unidos podría afectar el desarrollo de la moneda a lo largo del tiempo.
