Hoy se piensa en los vehículos autónomos como autos casi de uso diario en los cuales los ocupantes puedan ir leyendo el diario o tomando un café mientras una inteligencia artificial se encarga de todo.
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Pero, ¿qué pasaría si el concepto de vehículo autónomo pudiera utilizarse para otro tipo de actividades? Ahí es donde entra Nuro, un auto sin conductor que está pensado no para el uso tradicional de un auto (transporte de pasajeros), sino como camión de reparto.
Nuro parece una pequeña van y ciertamente lo es. Sus creadores son un par de exingenieros de Google llamados Dave Ferguson y Jiajun Zhu que antes trabajaron en Waymo, por lo que tienen experiencia en conducción autónoma. Y la idea de su startup es atacar a un segmento en el cual los vehículos autónomos no sean un lujo, sino una utilidad.
En el caso de Nuro, el fin es que le sirva a cualquier negocio que necesite repartir algo. Ya sean las compras de una persona a distancia o la ropa que acaba de salir de la lavandería, recorriendo distancias relativamente cortas dentro de una ciudad.
Por el hecho de no estar diseñado para mover personas, el Nuro es más pequeño que un auto normal. La visión de sus creadores es que una vez que el auto esté fuera de la casa del que espera una entrega, el compartimento se abra mediante un código repartido a través de una aplicación.
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Según el reporte de Bloomberg, la empresa detrás de Nuro todavía no cierra acuerdos para la fabricación del vehículo pero está en conversaciones con algunas tiendas minoristas que podrían estar interesadas en la tecnología. Porque al final, son las tiendas las que podrían sacarle el mayor provecho a algo como esto.
Probablemente de aquí hasta que Nuro salga a la calle todavía falte un rato, pero en el papel la idea es al menos interesante.
