Elon Musk tomó por sorpresa (y mató de la risa) a todos hace una semana; cuando se descubrió que su amenaza de construir un lanzallamas conmemorativo, para lanzarlo a la venta, era una realidad. Pero hay personas a las que no les hizo gracia el detalle.
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Con un precio de USD $500 el lanzallamas de The Boring Company acepta ya su compra adelantada a través de su sitio web oficial; logrando en pocos días ya más de 17.500 unidades apartadas, quedando sólo 2.500 piezas antes de agotar todo su inventario producido.
Hasta aquí todo suena perfecto para los negocios de Elon Musk. Pero el legislador de California, Miguel Santiago, se encuentra furioso con el juguete de Musk, ya que lo considera peligroso, y al parecer un chiste de mal gusto. Así que está determinado a prohibir su venta al público:
Musk por su parte ha ignorado relativamente las rabietas del político. Pero se ha tomado el tiempo para responder las inquietudes de algunos otros de sus seguidores; asegurando que su lanzallamas es seguro y legal, por el rango de distancia de la flama:
De hecho Elon parece que quiere llevar el chiste un paso más allá. Ya que también puso a la venta el extintor de fuegos oficial de The Boring Company, y se puede comprar junto con el lanzallamas.
