Malas noticias para Uber, ya que el gobierno de Londres anunció que no renovará la licencia que les permite prestar el servicio en la ciudad. Transport for London anunció que no renovará la licencia a Uber argumentando que el servicio no es adecuado, por lo que la empresa solo podrá prestar servicio hasta el 30 de septiembre.
Uber se mostró sorprendida por la decisión y dijo que apelarán. La empresa estadounidense dijo que Londres está cerrado a las compañías que quieren innovar y que esta medida terminará afectando a 3.5 millones de personas que utilizan la aplicación y a poco más de 40.000 conductores.
Transport for London (Tfl) dijo que varias medidas de Uber no cumplen con los estándares del gobierno, por ejemplo el modo como se denuncian delitos graves, la realización de pruebas a sus conductores, la obtención de certificados médicos y el uso del software Greyball que impide a órganos reguladores tener acceso a la aplicación.
El alcalde de Londres, Sadiq Khan, aplaudió la decisión de Tfl, mientras que el secretario general de la organización de taxis, Steve McNamara, estuvo de acuerdo en que no le renovaran la licencia a Uber.
Si algo es cierto es que Uber peleará para mantenerse operando por medio de una apelación. Mientras que la aplicación hace de las suyas en países donde hay poca regulación de transporte — como América Latina —, en Europa las cosas son distintas con las autoridades.
El problema para los londinenses es quedarse sin una opción de transporte que utilizan a diario, mientras que miles de conductores temen perder su empleo si Uber no consigue un permiso.
