Habiendo pasado ya un fin de semana post E3, ya es un buen momento para hacer un resumen de una feria que, a juicio de varios, resultó algo deslucida. Ya sea por la falta de anuncios rimbombantes de verdad –Metroid Prime 4 o el Pokémon para Switch no se si cuentan realmente- o por la falta de fecha de lanzamiento para juegos que repetían feria, lo cierto es que difícilmente sea uno de los E3 más memorables de la historia.
Pero hay puntos positivos y cosas que rescatar de la feria. Ya sean algunos juegos o bien presentaciones completas de algunas compañías de las cuales no se espera mucho.
Super Lucky’s Tale
Apareció en la conferencia de Xbox y nadie lo esperaba realmente; la secuela de un juego algo desconocido de Oculus Rift no es precisamente una receta para el hype, pero el título de Playful sorprendió. No solo por lo bien que se veía sino por lo bien que se jugaba: lo probamos y creemos que hay algo muy refinado detrás de ese apartado artístico que parece algo infantil. Justo de esos juegos que Xbox no tiene en abundancia.
Ubisoft
La compañía francesa por lo general muestra juegos que ya se conocen, secuelas de sus franquicias más grandes que se venden mucho pero que no son los que más aplausos se llevan por parte del público asistente a los teatros. Este año las cosas no cambiaron mucho, pero los productos mostrados por Ubisoft resultaron en su mayoría bien llamativos: el regreso de Assassin’s Creed después de un año de descanso (y viéndose muy bien en Xbox One X), la mezcla entre Mario y los Rabbids, piratas, más del polémico Far Cry 5 y hasta un refresco a la fórmula de The Crew. Por si eso fuera poco, coronaron el show anunciando lo que los fans pedían hace rato: Beyond Good & Evil 2, con sus desarrolladores casi llorando en el escenario. Para muchos, la mejor conferencia de E3.
Super Mario Odyssey
Mario siempre es sinónimo de interés colectivo, sea lo que sea que presenten. Este año, además de su aventura en conjunto con los Rabbids, apareció en E3 Super Mario Odyssey, el próximo gran juego de Nintendo Switch que en los dos niveles de su demo asumo que no dejó a nadie descontento. En uno de ellos, recorrimos una ciudad con personas reales y arriba de una moto (!); en otro, paseamos por un desierto congelado que incluso entre sus estructuras escondía secciones de un Mario en 2D al estilo original. En apenas una porción pequeña del juego, fueron demasiadas cosas interesantes que vimos en el juego que con toda seguridad va a ser uno de los más vendidos de fin de año.
Detroit: Become Human
Los juegos de Sony en general están viéndose bastante bien y pese a que no hay fecha de lanzamiento concreta para ninguno de ellos, el único jugable de los cuatro de la infame lista nos dejó muy buenas impresiones: Detroit Become Human. La premisa de su guión es de por sí interesante, pero la ejecución de la demo fue lo que, al menos a mi, me hace creer que el potencial de este título es mucho mayor a sus dos antecesores. La ambientación futurista (pero posible) del juego, además de las consecuencias de hacer que robots tomen decisiones con ética propia de humanos es algo en el papel, muy llamativo. El juego saldrá el próximo año recién pero desde ya le ponemos una que otra ficha.
Y además…
Hay otras cosas también destacadas de la feria, como por ejemplo, el exquisito gunplay de Destiny 2 (que pudimos probar en una pequeña pero ganadora partida contra otros periodistas), la versión de FIFA 18 para Switch que pese a la falta de modos de juego no se juega tan mal o lo bien que se ve Shadow of War.
Sin embargo, ahora la pregunta es para ustedes: ¿Qué fue lo que más les gustó de lo visto en el pasado E3?