Ha transcurrido un año desde que el FBI reveló que logró hackear el iPhone del tiroteo de San Bernardino, aún contra la voluntad de Apple. Desde entonces se ha especulado mucho sobre los métodos empleados y la suma de dinero pagada, pero esta última incógnita al fin ha sido despejada. Pero lo más curioso de todo es la forma en cómo terminó conociéndose este dato.
La información se dio a conocer de manera directa durante la audiencia del Comité Judicial del Senado del pasado miércoles 3 de mayo de 2017, con el Director del FBI, James Comey.
Pero no fue sino hasta el viernes que la gente de Associated Press reportó que la senadora Diane Feinstein había filtrado el monto, al parecer de manera involuntaria, durante su intervención en la audiencia al increpar la actuación de Comey en ese caso:
Así es, la identidad de la compañía encargada de hackear el iPhone de San Bernardino sigue siendo motivo de especulación, pero ahora resulta oficial que el FBI habría pagado una cifra prácticamente millonaria para violentar el smartphone.
Se trata de una filtración importante, sobre todo si se considera que el FBI había mantenido esa cifra como un asunto confidencial desde hace un año.
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