La Luna siempre ha sido un objeto de fascinación para la humanidad, pero calcular su edad, estimada en algo así como 4.300 años, siempre había sido un reto más cercano a un acto de adivinación que a un cálculo científico. Hasta ahora.
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Gracias a una serie de muestras de rocas lunares, traídas a la Tierra por medio de la misión espacial del Apolo 14, ha sido posible calcular con mayor precisión que nunca antes la edad verdadera de la Luna y resultaría que sería mucho más vieja de lo que se creía.
Los cálculos, publicados en la más reciente edición de la revista Science, revelan que la Luna habría nacido hace 4.510 millones de años, apenas 60 millones de años luego del origen de nuestro sistema solar. De modo que la Luna es mucho más vieja de lo estimado originalmente, y por consecuencia también cambiaría la cronología del gran impacto que dio origen a este astro.
El proceso para encontrar la edad real de la Luna, de acuerdo con Richard Carlson, miembro del Carnegie Institution for Science y supervisor del estudio, en entrevista para The Verge, consistió básicamente en descomponer todos los componentes minerales de las muestras obtenidas hasta dar con la fecha estimada de su momento de solidificación.
Aún así, el especialista advierte que el estudio podría no ser 100% preciso, ya que en el punto crítico de la descomposición de minerales, se optó por utilizar al Circón diluido en ácido como elemento clave para el cálculo, lo que podría afectar la estimación.
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