Hace un par de días durante la memorable presentación de Samsung la función más impresionante demostrada por el nuevo Galaxy Note 7 fue sin duda su escáner de iris. En ese momento soltaron muy pocos detalles en torno a la tecnología de operación de este sensor, revelando que se trataba de un proyecto en el que ya tenían bastante tiempo trabajo, pero sin revelar a detalle cómo lograba su magia.
Ahora, Samsung ha decidido ampliar la información, revelando con lujo de detalle el proceso de registro, identificación y comprobación con el que trabaja el escáner de iris incorporado al Galaxy Note 7, exhibiendo de paso que no se trata de un simple software integrado a la cámara frontal del terminal, sino que hay algo mucho más elaborado detrás de todo:
Tal como podemos observar en las ilustraciones, existe en realidad un sensor LED infrarrojo colocado a un costado de la cámara frontal, ambos dispositivos trabajan en conjunto para realizar el primer proceso de escaneo y registro del iris, mismo que es almacenado en la base de datos del terminal para los procesos de desbloqueo sucesivos.
Luego, cuando el usuario busca desbloquear el terminal es cuando entra en acción el software de reconocimiento para contrastar la imagen de retina guardada con la captura procesada lograda al momento, donde se remueven detalles como el perfil de las pestañas para lograr una “huella” nítida que permita comprobar la identidad del usuario.
Incluso se ha publicado un video donde brindan un poco más de detalles sobre el desarrollo del sensor, menos ilustrativo, pero igual de enriquecedor:
