Hace poco menos de tres años, el 1 de septiembre de 2013, se anunció un proyecto llamado Mighty No. 9. Diseñado por el ¿todavía? legendario Keiji Inafune, la promesa era crear algo digno del Mega Man más clásico, algo que a Capcom claramente no le interesaba a juzgar por los deficientes productos lanzados cada cierto tiempo.
Hoy, 21 de junio de 2016, Mighty No. 9 sale a la venta después de USD $3.8 millones recolectados, infinidad de retrasos, cambios de planificación y otros agregados no contemplados en el proyecto original.
Y los backers no están para nada contentos.
¿Dónde está mi Mighty No. 9?
“El juego está a un día de a salir y todavía no tenemos ni siquiera la versión digital”, me cuenta Paulo Muñoz, dueño y amo de Colemono. Él pagó USD $75 por la versión física, que incluía además de la digital, una figura especial de colección. Ninguno de los tres objetos le han llegado ni tampoco sabe cuando van a llegar.
Mario Caruffo, también conocido como Afrokid en El blog del Afro, puso más de USD $100 apoyando Mighty No. 9 cuando salió. “Entiendo los riesgos del crowdfunding”, confiesa Mario, “y aún así, cuando vi el proyecto de Inafune me pareció que lo lógico era apoyarlo”.
En general, hay varias coincidencias entre la gente que apoyó el proyecto. Tal como Paulo y Mario, Ana Guajardo de El Switch hizo lo propio simplemente porque se trataba de un proyecto lo más cercano y parecido al Mega Man clásico. “Fue un tema más de nostalgia que de confianza, pero jamás imaginé que tendría tantos problemas”, comenta Ana.
Los tres concuerdan en lo mismo: el manejo de todo lo relacionado al proyecto fue pésimo.
La imagen de Inafune y el legado de Mighty No. 9
Pese a lo anterior, ninguno cree que solo Keiji Inafune es el único culpable. Ana reflexiona que tanto el estudio como el resto de entes asociados tienen gran cuota de responsabilidad:
Mario Caruffo es todavía más lapidario y cree que el manejo de los líderes del proyecto fue sencillamente deficiente:
“Lo peor es que le ha hecho un daño tremendo a la plataforma y a los posibles futuros desarrolladores que querían ocuparla”, agrega Mario, mencionando también a Kogi Igarashi (Bloodstained: Ritual of the Night) y Yu Suzuki (Shenmue III), cuyos proyectos en desarrollo se armaron vía Kickstarter. “Si ellos la hacen mal, es mejor sepultar el desarrollo de juegos con financiamiento colectivo”.
Si hay que buscar culpables, para Paulo Muñoz el tema es simple. “Inafune nunca supo lo que tenía en las manos”, explica:
“Para mi, Inafune sigue siendo un grande”, dice Ana Guajardo, “pero aquí se cayó y se cayó mal”.
Mario y Paulo concuerdan con ello. Para el primero, Mighty No. 9 no va a cambiar el legado de Inafune en la industria. “Fue un hombre clave para Capcom. El tipo fue mucho más que solo Mega Man”.
Paulo Muñoz responsabiliza a Inafune “porque el fue el que falló y será el que pierda con todo, ya que lo van a recordar siempre por esto”.
El desastroso fin de un exitoso crowdfunding
Las primeras reseñas no han sido especialmente generosas con Mighty No. 9. Para los que pudieron ver como iba resultando el juego durante su desarrollo, de seguro la situación no es extraña y la recepción de Mighty No. 9 no ha hecho más que confirmar aquello, aún cuando mucha gente vaya a comprarlo por la publicidad detrás del proyecto y porque, pese a no ser el primero -eso queda para Broken Age-, es uno de los buques insignia del crowdfunding.
Mario Caruffo cierra algo lacónico sus reflexiones sobre Inafune y Mighty No. 9. “Sinceramente me da pena que todo lo anterior de Inafune vaya a quedar opacado, ya que de ahora en más será recordado por el pésimo manejo de una exitosa campaña en Kickstarter”.
Que Mighty No. 9 no sea tan bueno como se hubiera esperado al final para muchos puede ser el menor de todos sus problemas.
Mighty No. 9 ya está a la venta y cualquiera que no haya puesto dinero en su Kickstarter puede comprarlo libremente y jugarlo incluso antes que los que apoyaron a Keiji Inafune desde el comienzo, cuando el proyecto no era más que una idea llena de buenas intenciones. Ironías de la vida, conclusiones de un Kickstarter que comenzó como avión y terminó con demasiada gente molesta.
Al cierre
Durante la madrugada, alrededor de las 3 AM (hora de Chile), aparecieron finalmente los códigos del juego. Eso si, no sin problemas: quienes estaban esperando la versión de Xbox 360 tendrán que seguir esperando debido a “un error en la certificación” que necesitará un par de días antes de corregirse. Como compensación, se entrega un código extra de Steam.
La versión de PS Vita sigue en desarrollo. Las de 3DS y Wii U llegarán “pronto”.
Un error más en la larga lista de errores que fue el desarrollo de Mighty No. 9.