Hoy se dio la noticia de que por vez primera vez en la historia de Xbox se permitirá el crossplay en Rocket League. En ese tenor —y dado que en Niubie no hemos hecho un labs como tal— decidimos hacer este pequeño especial con los aspectos que más nos gustan de este divertido juego del estudio independiente Psyonix.
Fácil de aprender, difícil de dominar
La premisa en Rocket League es bastante simple. Dos equipos de carros futuristas se enfrentan en una arena gigantesca para meter la mayor cantidad de goles en la portería contraria. Un mapeo de controles básicos permite entender la física de colisión entre los vehículos y el entorno pero será determinante que acabes el tutorial en sus modalidades más difíciles para poder ser competitivo en los rankings más altos en línea.
Partidas locales en pantalla dividida
¿Eres de los nostálgicos que añoran los videojuegos a pantalla dividida? No te preocupes. Rocket League soporta partidas de hasta cuatro jugadores en modo local para que organices torneos en la comodidad de tu hogar.
Matchmaking
Actualmente juego Rocket League en Xbox One y debo de aceptar que la facilidad para encontrar partidas estables es notable. Esto no solo se aplica en la consola de Microsoft, de otros colegas también he escuchado halagos para el matchmaking tanto en PS4 y PC.
Micropagos
¿Un videojuego de generación actual que no abusa de microtransacciones? Así es. Rocket League es un título independiente a precio de USD $19.99 —muchos usuarios de PS4 lo recibieron gratis— cuyo modelo de negocio no se aprovecha de ordeñar a los usuarios con montañas de micropagos. En este título solamente encontrarás packs de skins a un precio congruente.
Crossplay
Un elemento que es parte de una de las noticias más importantes en materia de multijugador en línea. Los jugadores de One podrán competir contra usuarios de PC —beneficio que ya disfrutaban los usuarios de PS4—. Además, Microsoft insinúa que en algún momento se podría permitir el crossplay entre jugadores de PS4 y Xbox One.