Parece ser que los líos de patentes entre Apple y Samsung están por acabarse. La firma surcoreana ha acordado pagar la suma de USD $548 millones a Apple.
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El documento oficial del acuerdo tiene declaraciones oficiales de ambas compañías, en las cuales Samsung acepta pagar el dinero 10 días después de que Apple entregue la factura correspondiente.
Eso sí, ese acuerdo viene con un “pero” de parte de Samsung. Y es que el caso seguirá analizándose en una corte, por lo que si más adelante un juez decide que hay algún cambio y que las protestas de Apple por sus patentes no son totalmente válidas, Samsung podrá recuperar su dinero.
Samsung se reserva todos los derechos de obtener un reembolso de las cantidades pagadas a cualquier entidad en la eventualidad de que el veredicto sea revertido, modificado o descartado en la apelación, incluyendo el resultado de cualquier acta ante la Oficina de Patentes de Estados Unidos respecto a las patentes en disputa.
Por supuesto, desde Apple no están totalmente de acuerdo con este “apunte” de Samsung, por lo que más allá del acuerdo la disputa seguirá adelante el próximo año, en un caso que data desde el 2011.
Mientras tanto, ambas seguirán vendiendo millones de teléfonos como si nada pasara.
