Sucede casi todas las noches y mañanas, abrimos el frigorífico, nos servimos un vaso de leche, la probamos y resulta que ya está rancia. Es un ritual cotidiano que a todos nos ha resultado en un trago amargo (literalmente) en más de una ocasión.
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Ahora, gracias a la tecnología de impresión en 3D será posible ahorrarnos el episodio, con esta tapa inteligente para cartones de leche, capaz de detectar si el contenido de su envase ya está agrio.
Los detalles del funcionamiento de esta “tapa inteligente” han sido compartidos en la más reciente edición de la revista Nature, en donde un grupo de ingenieros de la Universidad de Berkeley, han creado este dispositivo integrado con algunos componentes electrónicos, que ayudan a medir las variaciones internas del envase, en su temperatura e índice de bacterias, para determinar en razón de tales variables si el líquido contenido ha entrado en estado de descomposición.
(C) Nature
De acuerdo con los chicos de Science 2.0, durante un tiempo se tenía como teóricamente cierto que los artículos impresos en 3D a base de polímeros podrían integrarse con algunos componentes eléctricos y sensores inalámbricos, bajo una combinación especial, para crear nuevas piezas de tecnología, operativas, a la medida, y ahora esta tapa, adaptada para un cartón de leche común, vino a ser la comprobación de este supuesto.
El proceso de creación de esta tapa inteligente fue relativamente simple y creativo: se desarrolló su forma en un molde donde se aplicaron polímeros y cera, posteriormente la cera fue removida para reemplazarse por plata líquida, amoldada acorde con el diseño para funcionar como conductor para el sensor. Una vez instalado el dispositivo en el cartón se dejó abierta la leche a temperatura ambiente por 36 horas. El circuito entonces detectó los cambios en la temperatura y señales eléctricas que se produjeron al interior del envase al incrementar su nivel de bacterias por la descomposición.
La visión de futuro de esta tapa inteligente es que algún día las personas puedan descargar el archivo de impresión para crearlo y utilizarlos en sus propios envases. Falta mucho para este momento, pero este es un primer paso.