Kim Dotcom, empresario de Internet y ahora convertido en mártir del mundo del copyright por el cierre de Megaupload y su larga batalla legal contra los estudios de Hollywood, tiene una idea para crear una segunda Internet, una descentralizada y que no esté en poder de empresas.
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No me refiero a Tor, me refiero a MegaNet. Esta es la idea de Kim Dotcom, crear una segunda Internet cifrada y cuyos nodos para conectarse serán nuestros propios smartphones que harán uso del ancho de banda que tengamos para poder cifrar y mover todo el tráfico que genere.
La idea es en sí muy similar a Tor, pero Kim Dotcom quiere lanzarlo como un producto para todo el mundo. Eso no será hasta por lo menos principios de 2016 según ha comentado en Twitter.
La idea de Dotcom es muy interesante con pizcas de megalomanía. Es como si lleváramos en nuestro móvil un nodo de salida de Tor que redirecciona y redistribuye el tráfico de parte de la red, lo que si funcionase crearía una Internet alternativa para todo el mundo y que no podría ser espiada o controlada.
Técnicamente no se podría depender exclusivamente de redes móviles ante la falta de potencia, pero según crezca las redes y los dispositivos, estos podrían ser usados para hacer todo el trabajo.
¿Es realista crear una red alternativa y conectada desde nuestros móviles? Si, claro que es posible, pero como algo nos ha demostrado Tor es que aunque puede ser de utilidad, la realidad es que la gente le gusta encontrarse, ser encontrada y compartir datos. No es una excusa para que empresas o gobiernos hagan lo que quieran con esos datos, pero parte del problema de Tor está en su diseño casi imposible de indexar.
Dotcom no es el único creando una nueva Internet
Con todos ustedes, MaidSafe. Se trata de una red de datos y acceso a Internet descentralizada que usa un software para conectarse. En gran medida es similar a como funciona Tor. Tu tienes un equipo conectado a una red que otros usan para conectarse de la misma forma que tú te conectas a otros equipos.
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La diferencia de MaidSafe es que también es capaz de almacenar datos de forma segura y cifrada fragmentando cada archivo y mandándolo a diferentes puntos de la red, así puedes acceder a tus archivos desde donde sea y sin perderlos.
La idea de que exista una Internet secundaria no es ciencia ficción, en realidad existen muchas otras redes de una Internet oculta no accesible a millones de personas, sobre todo en sectores de defensa y empresas. Las redes internas de una empresa que no están conectadas a Internet puede considerarse en sí como una Internet propia. El propio Tor viene de un proyecto creado originalmente por el Laboratorio de Investigación Naval de los Estados Unidos.
Las redes independientes serán siempre una buena idea siempre y cuando los servicios que usamos se puedan acceder, si no, acaban siendo redes cerradas sin mucho más uso que una prueba de tecnología.