Varias ciudades del mundo se pelean por tener grandes congresos internacionales, uno de ellos es el Mobile World Congress. Ciudades de Italia o Francia han estado en la carrera por hospedar el congreso de telefonía y conectividad que se celebra desde hace años en Barcelona, pero la llegada de una nueva alcaldesa crítica con estos megacongresos parece poner en crisis nerviosa a mucha gente.
PUBLICIDAD
Un artículo en El País se pregunta si con la elección de Ada Colau, que todo apunta será la nueva alcaldesa de Barcelona, el Mobile World Congress podría no renovar con Barcelona. El problema está en que Colau, que recientemente acaba de ganar las elecciones por la capital de Cataluña y que llega desde el mundo del activismo, podría poner trabas a la GSMA para que la ciudad tenga más ingresos por este evento.
Barcelona hizo una oferta a la GSMA para que el Mobile World Congress se mantenga en Barcelona hasta el año 2023 y es que hay que entender que este congreso genera unos ingresos brutos para la ciudad de 436 millones de euros. También la creación de miles de empleos temporales que duran un par de meses.
“No me parece razonable que en la ciudad del Mobile haya un distrito como Nou Barris donde la mitad de la población no tiene acceso a Internet y que haya barrios en los que no llegue ni al 70%”
El problema de la nueva alcaldesa de Barcelona es que los ingresos están muy mal repartidos entre los diferentes barrios de la ciudad y no toda la ciudad se puede aprovechar de uno de los congresos más grandes del mundo. También que el que la ciudad dependa solo del turismo y congresos les pone en riesgo de ser dependientes de el exterior, y no crear mejores negocios locales.
Barcelona construyó hace unos años una nueva feria para alojar en gran medida las necesidades del Mobile World Congress, llevándose el evento unos kilómetros más al sur, a la ciudad limítrofe de L’Hospitalet de Llobregat. Esta inversión está pensada a largo plazo para tener más congresos y sobre todo intentar que tras diez años, el Mobile World Congress se mantenga otros diez años.
¿Corre peligro el Mobile World Congress en Barcelona? La transformación de este sector ya nos dice que estos congresos, en algún momento, se tendrán que hacer más pequeños y extenderse a más países, pero a corto plazo no parece que Barcelona vaya a dejar de alojar uno de los congresos más importantes, por nombre y claro, por los millones de euros que deja en la ciudad.