Hoy es el lanzamiento del remasterizado Devil May Cry y en Digital Foundry aprovecharon para revisar el juego en su versión de PS4 y también comparándolo con la anterior versión de PS3.
Lo primero a mencionar es el tema de la resolución. Los 1080p de la remasterización claramente hacen una diferencia respecto a lo que ya se había visto y si a eso se le suman los teóricos 60 cuadros por segundo, la presentación sube unos cuantos niveles.
Gracias a esos -de nuevo, teóricos- 60 cuadros por segundo, la latencia del control se ha reducido y con ello el juego se acerca un poco más a la sensibilidad de los Devil May Cry realizados anteriormente en Japón.
Sin embargo, la edición de PS4 analizada por Digital Foundry reveló algunos problemas, principalmente en el framerate que no siempre alcanza los 60 cuadros por segundo que son los ideales. La sincronización vertical que evita que la pantalla se “parta” en algunas zonas está activada, pero no siempre y hay veces que el efecto tearing se hace presente.
El artículo de Digital Foundry está lleno de detalles, para quienes estén interesados en cuestiones más técnicas. La conclusión en general es que si bien esta remasterización se acerca bastante a la edición de PC del juego original, todavía hay algunas cosas en las que aquella plataforma sigue siendo superior.
