El casco para pilotear los nuevos F-35 de la Real Fuerza Aérea Australiana destaca por su costo de USD $770.000. El gobierno australiano invertirá USD $12.400 millones para la adquisición de 72 aeronaves del modelo antes mencionado que le darán un importante impulso tecnológico a su poder armamentista.
Los F-35 son desarrollados por la compañía estadounidense de tecnología armamentista Lockheed Martin.
Los 72 cascos para cada F-35 adquirido serán hechos a la medida para los pilotos que van a manejar estos impresionantes vehículos voladores.
La interfaz del casco —construido con piezas de ingeniería electrónica no reveladas— muestra información en tiempo real de todo lo importante que sucede alrededor de la aeronave, monitoreando constantemente las condiciones de vuelo y buscando posibles amenazas.
Un elemento de tecnología de realidad virtual permite escanear la aeronave como si sus partes estuvieran hechas con materiales transparentes.
Se espera que los aviones adquiridos por la Real Fuerza Aérea Australiana aterricen en 2018, pero será hasta 2020 que puedan ser usados en combate.