El telescopio espacial Hubble ha logrado identificar una nueva galaxia enana a dos megaparsecs de distancia de nuestro planeta, dentro de nuestro vecindario galáctico. Inicialmente se había detectado el objeto, pero se dudaba sobre su naturaleza; ahora, las imágenes del Hubble han permitido confirmar que es una enana en forma de esfera, es decir, no tiene brazos en forma de espiral.
Esta galaxia enana contiene poco gas para facilitar la creación de estrellas y está llena de estrellas rojas gigantes, estrellas muy viejas. Las mediciones arrojan que la estrella más joven de esta galaxia, denominada KKs3, fue creada hace mil millones de años. También hace muchos millones de años las galaxias enanas se fusionaron y se crearon las galaxias más grandes, como la Vía Láctea.
D. Makarov
Es por esto que el descubrimiento de KKs 3 es de importancia para la comunidad científica, los modelos de la cosmología apuntan a que debería haber muchas galaxias enanas, pero nuestras observaciones difieren y sólo conocemos 30 enanas esféricas en nuestro vecindario galáctico.
Lo complicado para detectarlo es, justamente, la falta de gas. Si hubiera más, habría más estrellas y, por ende, mayor luminosidad. Esto podría cambiar con el lanzamiento del telescopio espacial James Webb programado para 2018 y, como todo en la ciencia, mientras más datos tengamos, más fácil será estudiar el fenómeno de las galaxias enanas.