Dice Joaquín Sabina que si quieres vivir cien años no vivas como vive él, hagas músculo de cinco a seis y reduzcas la velocidad. Pero el Centro Nacional de Investigaciones Oncológicas difiere y, recomienda, que si quieres vivir 100 o más años, tengas una mutación en el gen apolipoprotein B.
Aunque, claramente, (no) es tan sencillo como evitar el humo de los puros, resulta que esta extraña mutación se encontró en un grupo de de tres familias con historial de longevidad. Para buscar esta rara mutación se secuenció el exoma, la parte del genoma que mantiene el ARN mensajero, de tres centenarios españoles y cuatro de sus descendientes. El grupo control lo formaron 800 personas.
El resultado es que esta mutación, junto con otra en el apolipoprotein E que ya se había estudiado con anterioridad, tienen influencia en como el cuerpo ataca los niveles de colesterol malo. Los estudios sugieren que la proteína creada por este gen ayuda al cuerpo a deshacerse del colesterol malo, lo cual, a su vez, hace que se reduzcan la cantidad de ataques al corazón.
El siguiente paso es tratar de comprobar el vínculo entre el colesterol y el alipoprotein B para soportar la tesis que una buena salud cardiovascular es uno de los factores más importantes para la longevidad; por otro lado, el gen FOXO3A también se ha encontrado en experimentos con humanos cuya vida ha sido inusualmente larga y está relacionado con la insulina.
Y, como apunte suelto, la probabilidad de que alguno de nosotros llegue a los 100 naturalmente es baja, dado que solo 1 de cada 5.000 personas alcanzan el centenario.