El Proyecto Loon de Google, que busca llevar internet a zonas “no iluminadas”, ha sufrido otro caído en combate. Casi literalmente, porque si bien los globos no van a la batalla, sí se caen; esta vez, el turno fue de uno que despegó en el estado de Nevada y terminó en el suelo de una zona rural un poco más al norte en el estado de Washington.
Los reportes de TechCrunch y el Yakima Herald indican que el incidente ocurrió la semana pasada y terminó con, además del globo en el piso, unas cuantas casas sin energía eléctrica.
Dicen en Google que “continuamos haciendo vuelos de investigación para mejorar la tecnología”, y eso incluye tener un equipo dedicado exclusivamente a recoger los globitos en tierra.
También se reveló que desde Google anticiparon el problema y avisaron oportunamente a los encargados de aviación para así no tener problemas con los vuelos que anduvieran en rutas cercanas. Aquella estrategia funcionó bien, no así la de hacer que el aterrizaje fuera tranquilo y por ello el corte de suministro de electricidad.
No es el primer globo del proyecto que cae desde lo alto. Hace algunos meses sucedió algo similar en la Patagonia argentina, y nótese que la explicación de Google fue exactamente igual a la de ahora.
Se cree que, dada la poca distancia entre el despegue y su caída, el globo recuperado en Washington no estuvo mucho tiempo en el aire.