¿Recuerdan a Stuxnet? Se trató de un virus informático que intentaba sabotear los programas nucleares iraníes , creado por EE.UU. e Israel y que sacó a la luz pública la existencia de programas de gobierno para echar abajo sistemas de control vitales en una nación enemiga, haciendo popular el término de “ciberguerra” en la prensa mundial.
Y ahora se ha descubierto otro de estos programas liderado por un grupo de hackers que se hace llamar “Dragonfly”, el que parece estar patrocinado por un gobierno hasta ahora desconocido y que apunta a sabotear las redes energéticas de Estados Unidos y otros países, siendo de alcance mucho más amplio que Stuxnet, proyecto que tenía como objetivo únicamente a Irán.
Según se reporta desde Symantec, los ataques de Dragonfly dejan abiertas “puertas traseras” en los sistemas informáticos de plantas nucleares y otras instalaciones relacionadas a la energía. Por ahora no se ha informado sobre ataques concretos que hayan dejado daños, pero al parecer la posibilidad está para que los hackers gatillen un desastre cuando ellos lo deseen.
Y es que Dragonfly comenzó en 2011 teniendo como objetivo a agencias de aviación y defensa, para luego migrar en 2013 hacia sistemas energéticos vitales para cualquier nación. Es por eso que Symantec ha tenido tiempo para alertar a las plataformas afectadas, quienes ya podrían tomar algún plan de acción para evitar un futuro desastre ocasionado por esta clase de ataques informáticos.