Hace unas semanas se reportó que ZeniMax había enviado documentos legales a la compañía Oculus VR a manera de reclamo para objetar que su antiguo empleado y actual director de tecnología de Oculus, John Carmack, había colaborado con la creación de Rift al utilizar materiales y conocimientos de ZeniMax para compartirlos con Palmer Luckey, creador del dispositivo de realidad virtual.
PUBLICIDAD
Ahora ZeniMax ha demandado oficialmente a la compañía Oculus VR y a su fundador Palmer Luckey.
La demanda expuesta en una corte de Texas muestra detalladamente el porqué de esta acción legal:
Bajo un contrato de confidencialidad, Zenimax brindó a los Acusados de acceso a propiedad intelectual desarrollada por ZeniMax después de años de inversión e investigación. Esta propiedad intelectual incluyó código protegido por derechos de autor, información comercial secreta y conocimientos técnicos. El acuerdo de confidencialidad dispone expresamente que la propiedad intelectual de ZeniMax es confidencial y de propiedad exclusiva que no puede ser divulgada a terceros sin previa autorización por escrito. Los Acusados han tomado la propiedad intelectual de ZeniMax y la han explotado comercialmente para su propio beneficio. Los Acusados ahora ostentan miles de millones de dólares en valor a partir de la propiedad intelectual de ZeniMax. Los Acusados nunca obtuvieron licencia para usar la propiedad de ZeniMax ni el derecho para venderlo o transferirlo a un tercero. Por esta acción ZeniMax busca la reparación de los daños que justa y completamente lo compense por las infracciones y apropiación indebida de su propiedad intelectual realizadas por los Acusados.
En el documento se describe que entre 2011 y 2012 John Carmack desarrollaba tecnología de realidad virtual para el estudio id Software propiedad de ZeniMax. Posteriormente, en abril de 2012, Carmack conoció a Palmer Luckey en un foro de internet.
Según ZeniMax, Luckey había desarrollado una versión sumamente primitiva de lo que conocemos hoy como el Oculus Rift y se lo envió a John Carmack, quien se había entusiasmado por la idea. A esto, Carmack desarrolló complejas modificaciones al prototipo enviado por Luckey con la investigación que ya había desarrollado para ZeniMax. En esta versión de Rift realizó sustanciales mejoras en el campo de visión, centro de proyección y aberraciones cromáticas. Además se alega que diseñó sensores especiales y software programado para reducir la latencia y prevenir distorsiones.
En mayo de 2012 ZeniMax hizo firmar a Palmer Luckey el Acuerdo de Confidencialidad relacionado a la propiedad intelectual de la tecnología provista por la compañía.
Con las modificaciones realizadas al Rift, Carmack pudo presentar en junio de este año el dispositivo de realidad virtual en la Electronic Entertainment Expo del 2012 en la cual ganó el premio por “Mejor Hardware/Periférico” de la convención.
PUBLICIDAD
Con todo el foco de los medios y a pesar de haber firmado el acuerdo, Palmer Luckey estableció Oculus LCC, la compañía que sería predecesora de Oculus VR.
Después de haber establecido esta nueva empresa, Palmer Luckey continuó utilizando insumos de ZeniMax.
Palmer Luckey posteriormente empezó a generar la propuesta para hacer la campaña de financiamiento en Kickstarter y ZeniMax ofreció un acuerdo para la comercialización de Rift. Luckey ignoró esta propuesta de ZeniMax.
ZeniMax posteriormente instó a Luckey y Oculus VR a apegarse al acuerdo de no divulgación pero no recibieron la respuesta deseada. Luckey siguió promocionando Rift sin ningún tipo de restricción y Carmack presentó una demo con Doom 3 en la Gamescom y Pax Prime.
Zenimax pidió una compensación por la violación del acuerdo de confidencialidad pero recibió constantes rechazos. Después de insistir, Oculus ofreció un 3% de sus acciones a ZeniMax a cambio de campañas de marketing, copias de Doom 3 como beneficio para los benefactores en Kickstarter, USD $1,2 millones y el asesoramiento de John Carmack.
Zenimax hizo una contraoferta en la que otorgaría apoyo para el desarrollo de Rift más una licencia de su tecnología de realidad virtual a cambio de un mayor porcentaje.
Oculus no aceptó esta oferta. Ahora solo Oculus otorgaría a ZeniMax una parte de su valor si invertía varios millones de dólares para el desarrollo de Rift.
Con esa última propuesta se terminaron las negociaciones entre ZeniMax y Oculus VR. Meses después John Carmack y varios empleados de id Software se unieron a Oculus VR para trabajar de lleno en el periférico.
Facebook compró Oculus VR por USD $2,000 millones en marzo de 2014.
Tanto Oculus VR y el mismo Facebook no han hecho declaraciones oficiales sobre este litigio.
Actualización: Un representante de Oculus VR declaró lo siguiente:
La demanda presentada por ZeniMax no tiene mérito alguno […] Como hemos dicho anteriormente, ZeniMax no contribuyó a ninguna tecnología presentada en Oculus. Oculus defenderá enérgicamente estas afirmaciones.