En estos momentos en Estados Unidos, el FBI está buscando activamente contratar a más agentes destinados a la ciberseguridad. Sin embargo, se ha encontrado con un problema bastante grande: el FBI tiene una política de cero tolerancia contra las drogas, incluyendo la marihuana.
Este año el Congreso norteamericano autorizó al FBI a añadir 2.000 agentes, donde la mayoría deberán ser reclutas asignados a combatir el cibercrimen ya que es una prioridad que crece cada año para la agencia.
El director de la agencia, James B. Comey, aseguró este lunes ante el Colegio de Abogados de Nueva York que si el FBI tiene la intención de continuar manteniendo sus capacidades a la par con la de los cibercriminales, la organización deberá relajar sus políticas de cero tolerancia para así contratar a personas que fumen marihuana.
Sin duda que es bastante gracioso atestiguar que el mandamás de la policía federal más grande del mundo reconoce que los hackers son bastante asiduos al consumo de cannabis:
Comey afirmó que la agencia está analizando cómo flexibilizar sus políticas respecto a la marihuana, las que excluyen a cualquier postulante que haya consumido cannabis en los últimos tres años. De hecho, uno de los asistentes a la conferencia de Comey le comentó que ‘un amigo’ no quiso postular por estas políticas de cero tolerancia, ante lo que Comey respondió que “igual debería postular“.
