Tesla, la compañía de automóviles eléctricos de Elon Musk, planea crear una “Gigafábrica” (Gigafactory, según sus planes) que para 2020 tendrá capacidad para producir 50 veces la cantidad de baterías que se utilizaron en vehículos Tesla el año pasado. Tesla espera estar vendiendo unos 500.000 vehículos eléctricos al año para entonces, en comparación a los 20.000 vendidos el año pasado.
Cuatro estados de Estados Unidos están ahora compitiendo para que se instale la fábrica allí, aunque más allá del impacto local, el plan de Tesla podría tener un gran impacto en el mercado de las baterías.
La demanda de baterías de ion-litio de Tesla es enorme. Un Model S usa unas 7.000 baterías cilíndricas Li-ion 18650 (similares a una pila AA), que compra en este momento a Panasonic. La compañía comenzó a buscar más proveedores para ampliar su capacidad, y ahora pretende tener su propia fábrica.
La fábrica buscará tener acceso a energía solar y eólica para funcionar, y planea comenzar su producción en 2017, para alcanzar su máxima capacidad en 2020.
No se sabe si Tesla planea vender los baterías que no utilice a otros fabricantes de automóviles, aunque se han hecho suposiciones de que podría ir más allá y proveer baterías para diferentes productos también, en base a las conversaciones mantenidas entre Elon Musk y Apple.
Además de baterías para gadgets, la fábrica también produciría baterías para almacenar energía capturada del sol, viento y agua. Este tipo de baterías tienen la capacidad de mantener a una casa funcionando un par de días. Cabe recordar que Musk también ha invertido en SolarCity, que instala paneles solares en hogares.
Se estima que el costo de la Gigafactory estaría entre USD$4.000 millones y USD$5.000 millones.
Link: ExtremeTech / Wired
