La popularidad de la tecnología siempre tiene consecuencias, directas o indirectas, pero cualquier evolución que en un corto plazo de tiempo haga que una zona en concreto se desarrolle económicamente gracias a unas pocas empresas, provoca reacciones.
Hace poco que empezaron las protestas en San Francisco en contra de las empresas tecnológicas. Son los vecinos de las zonas más comunes de San Francisco, una de las ciudades más importantes del mundo de la tecnología por ser incubadora de cientos de startups y estar cerca de Silicon Valley. Estos vecinos están protestando por algo simple: quieren que las empresas tecnológicas paguen más impuestos en la ciudad ya que algunas de ellas ganan millones, pero reportan a la ciudad muy poco en compensación.
Pero la protesta más inquietante es algo quizá mucho más importante, la vivienda. Se protesta porque al ser una zona donde la tecnología ha provocado grandes empresas que generan miles de millones de ganancias, esto provoca que cada vez los sueldos de sus trabajadores sean más altos, creando una nueva élite económica muy concentrada en personas que se dedican a desarrollar, al marketing o simplemente por trabajar en algún puesto de una Facebook, Google, Zynga, Apple, Dropbox…
Que estas empresas paguen el máximo sueldo posible a sus trabajadores para retener talento es algo lógico. Pero recuerda, ante una acción, siempre hay una reacción. En este caso la reacción es que los precios de los alquileres en San Francisco, sobre todo en zonas residenciales de familias normales, están subiendo ante una especulación por captar a más de estos nuevos asalariados tecnológicos.
Este es el problema lógico del libre mercado, ante una demanda de vivienda, el que mejor paga es siempre el que mejor lugar encuentra. Pero algunas asociaciones no se lo están tomando del todo bien.
Los autobuses privados que transportan empleados de estas empresas desde San Francisco, Oakland o hasta las diferentes ciudades del valle están provocando problemas de circulación y muchas de las protestas se están dirigiendo directamente a estos autobuses, incluso llegando a atacarlos.
— Enrique Dans
Estas protestas ha provocado que empresas como Google, se lleguen a plantear el uso de ferrys privados para transportar empleados.
No solo se trata de un problema que reside en San Francisco o en California, también Microsoft lo está empezando a sufrir. En este caso se trata de una protesta en contra de Microsoft en Seattle, sobre todo entre las ciudades de Redmond (donde está el campus de Microsoft) y Bellevue, una bonita ciudad pegada a Redmond que sirve de ciudad dormitorio para gran mayoría de los trabajadores en este área de Seattle.
Una de las diferencias de Microsoft en Seattle con Sillicon Valley es que Microsoft tiene una flota de autobuses y taxis propios que lleva de forma gratuita a todo trabajador o visitante oficial de Microsoft. Durante una visita en el campus de Microsoft hace unos años, con tu acreditación de visitante era fácil coger un autobus para que te llevase a un edificio en concreto, una gran ayuda teniendo en cuenta que Microsoft tiene más de 70 edificios y oficinas repartidas por Redmond y Bellevue.
Microsoft defiende esta flota de vehículos porque permiten mover a muchos trabajadores al mismo tiempo, así reduciendo la congestión de las carreteras de Seattle y sobre todo, reduciendo su emisión de CO2. Las protestas se centran en que muchos de estos autobuses están viajando sin ningún empleado o visitante dentro, por lo que no reducen el CO2 si tienes vehículos moviéndose sin personas dentro.
Evidentemente, es parte de un movimiento similar al de California, en el que también se protesta por la subida del nivel de vida tan drástico que algunas zonas residenciales están viviendo con alquileres más altos, restaurantes con precios menos asequibles y lo que en general se reduce a un coste de la vida mucho más elevado en un tiempo muy reducido.
Este es un clásico problema de desarrollo económico desigual, que directamente no tiene una solución clara al ser un mercado de libre competencia, pero que ataca la vida de miles de personas.
Link: Geekwire
Foto portada: @craigsfrost