La incontable información filtrada por Edward Snowden está provocando nuevas revelaciones sobre las costumbres de monitoreo y espionaje de la NSA. Ahora se sabe que los gobiernos de EE.UU. y Reino Unido han colaborado para poner más presión a Wikileaks.
Es conocido que Wikileaks, desde la publicación de los miles y miles de cables de información entre embajadas y los servicios de relaciones internacionales, es una organización non grata y perseguida, incluso se cree que las órdenes internacionales en contra de Julian Assange están provocadas por una colaboración entre países para extraditarlo a EE.UU.
Pero los últimos documentos publicados por The Intercept, que tiene todos los archivos de Snowden, informan sobre las maniobras que los gobiernos de EE.UU. y Reino Unido han estado llevando a cabo para deteriorar la imagen de Wikileaks.
Según la información recogida por The Intercept, las agencias NSA y la británica GCHQ habrían colaborado para en la vigilancia encubierta de partidarios y activistas de Wikileaks.
En concreto, a lo largo de 2012 GCHQ habría logrado monitorizar las visitas a la web de Wikileaks gracias a su habilidad para infiltrase en redes de fibra óptica entre servidores, logrando almacenar direcciones IP de visitantes y los términos de búsquedas que llevaban a la web de Wikileaks.
Previamente, en julio de 2011 varios oficiales de la NSA consideraron incluir a Wikileaks en la lista de “malicious foreign actor”, algo así como una lista de enemigos internacionales, lo que les permitiría mantener a sus miembros en un constante estado de monitorización, incluyendo ciudadanos de EE.UU.
Esta no es la primera vez que Reino Unido y EE.UU. colaboran de esta forma, son dos aliados importantes en la monitorización de personas para la NSA y viceversa. GCHQ es una conocida del hacking de sitios para infiltrase en empresas.
Más presión en contra de Assange y colaboradores
Lo quizá sea menos sorprendente es la presión del gobierno de EE.UU. en otros países aliados para lograr que Julian Assange acabe siendo arrestado y llevado ante la justicia norteamericana como máximo responsable de las filtraciones de los cables .
Estas presiones a países como Reino Unido, Alemania, Australia, Islandia y otros países aliados intentarían que sus fuerzas de seguridad colaborasen en la monitorización de Assange y su “red humana de colaboradores”. Assange, que lleva desde junio de 2012 refugiado en la embajada de Ecuador en Londres, cuya embajada está siendo monitorizada y en la que Reino Unido se está dejando una fortuna.
Pero Reino Unido no solo está intentando colaborar en lo máximo posible con NSA en términos relacionados con Wikileaks, una abogada de Edward Snowden ha sido retenida en el aeropuerto de Heathrow para ser entrevistada ante preguntas como “¿Quién es Edward Snowden?” o “¿Por qué ha ido a Rusia dos veces en tres meses?”.
Esto es solo una pizca del seguimiento que las agendas de seguridad aliadas con EE.UU. ejercen ante los medios y las personas que están relacionadas con la revelación de secretos. Y es que no se revelan secretos de una agencia de espionaje sin hacerse algún que otro enemigo.
Link: The Intercept
Foto (CC) marshall24