Steve Ballmer se despidió de los empleados, en una última reunión general como CEO de Microsoft. El ejecutivo anunció su retiro en los próximos 12 meses, y debe ir cerrando capítulos para que la compañía continúe. Sin embargo, la despedida no deja de ser un asunto emocional para él, que lleva 33 años en la compañía.
“Tenemos un potencial increíble frente a nosotros, tenemos un destino increíble. Nuestra compañía y un puñado de otras están destinadas a escribir el futuro. Pensaremos en grande, seremos grandes”, dijo emocionado Ballmer, según relata Reuters, reutilizando una frase que ya había dicho en su primera reunión de empresa en 1983.
“Lanzaremos el próximo gran éxito… cambiaremos el mundo de nuevo”, dijo a los empleados en un discurso de una hora, en el que también comentó la adquisición de Nokia y el traspaso del rol de CEO a su sucesor, que aún no ha sido elegido.
Según los reportes, Ballmer eligió poner de fondo la canción que usó para la primera reunión de 1983, “Wanna be startin’ something” de Michael Jackson, y procedió a saltar y bailar sobre el escenario, como se le conoce en otras presentaciones. Luego que acabó la canción, Ballmer se detuvo para “apreciar el momento”.
Ballmer agradeció también a los alrededor de 13.000 empleados de Microsoft que hicieron fila para ver su discurso final. “Quiero decirles gracias. Esto no es sobre una persona cualquiera. Es sobre una compañía que es importante, que piensa a futuro, que es innovadora”, afirmó. El discurso concluyó con la canción “I’ve had the time of my life“, ante lo cual Ballmer volvió a ponerse a bailar y correr en el escenario. Según los reportes, los empleados en el público le tomaban la mano y gritaban “te queremos!” y aplaudieron durante todo el discurso.
Ballmer seguirá siendo CEO en los próximos meses hasta que se designe a un sucesor, que está siendo escogido por un comité formado por miembros del directorio de la empresa, incluyendo a Bill Gates.
Link: The Verge